Los que me conocéis un poquito, ya sabéis la debilidad que tengo por mi amigo Ramón, porque esta canción es muy Ramón.
En sus últimos discos está dejando atrás a ese Melendi canalla, para dar rienda suelta al pedazo corazón de Ramón.
La canción es genial, sublime. Y, ¿el videoclip? El vídeo es precioso.
La casa no es igual, amor, sin ti. La casa sin tu ropa por el suelo, es como un parque sin hojas en noviembre.
Los espejos no sonríen, y en el baño hay huelga armada por dejarte solo el rímel y llevarte tu mirada.
Los borrachos y los niños dicen siempre la verdad. Y amor, desde que te fuiste, ya ves, soy mitad y mitad. No he aprendido a vivir solo, puede que no haya querido. Porque yo solo imagino una vida contigo.
Los borrachos y los niños dicen siempre la verdad. Y amor, desde que te fuiste, ya ves, soy mitad y mitad. No he aprendido a vivir solo, puede que no haya querido. Porque yo solo imagino una vida contigo.